Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2020 - junio 2020
1 Magister en Ciencias. Facultad de Ciencias y Filosofía,
Universidad Peruana Cayetano Heredia.
Discurso sobre el Premio
southern Perú 2019 al
Dr. abraham Vaisberg Wolach
*
Address on the Southern Peru Award 2019 to
Dr. Abraham Vaisberg Wolach
Carla Gallo López-Aliaga
1
* Discurso pronunciado el día 28 de noviembre del 2019 en la
Ceremonia de Premiación Southern-Perú 2019 y Medalla
Cristóbal de Losada y Puga a la creatividad humana 2019.
D
r. Salomón Lerner Febres, presidente
del Consejo Permanente del Premio
Southern Perú; Dra. Cristina del
Mastro Vecchione, vicerrectora académica
de la Ponticia Universidad Católica del
Perú; Ing. José Nicolás de Piérola, gerente
de Recursos Hídricos de Southern Perú; Dra.
María de los Ángeles Fernández, secretaria
ejecutiva del Premio Southern Perú; y, Dr.
Abraham Vaisberg Wolach, ganador de la
Medalla Cristóbal de Losada y Puga en el
campo de las ciencias, Premio Southern-Perú
2019.
Señoras y señores:
Si quisiera sintetizar la trayectoria de
Abraham en el campo de las ciencias, podría
decir que él, la ciencia y la Universidad
Peruana Cayetano Heredia constituyen un
núcleo de componentes inseparables.
Y es que Abraham tiene toda una historia de
vida en la Universidad Peruana Cayetano
Dr. Abraham Vaisberg Wolach
Heredia. Ingresó a estudiar medicina en 1964.
Era el tercer año de existencia de aquella
amante casa de estudios, aún denominada
Universidad Particular de Ciencias Médicas
y Biológicas; pero que, a los pocos meses,
recibiría el nombre de su primera facultad
de medicina: “Cayetano Heredia”. Abraham,
en su día a día universitario, disfrutaba de
las conversaciones y discusiones con sus
profesores, docentes de la entonces sección
premédicas. Es así, que pronto se daría cuenta
de que, probablemente no era necesario
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2020 - junio 2020
93
terminar la carrera de medicina para plasmar
lo que realmente le atraía: la investigación,
el hacer ciencia. No fue mucho después,
que solicitó su traslado a la recién estrenada
Facultad de Ciencias y Humanidades, actual
Facultad de Ciencias y Filosofía.
Abraham se graduó de Bachiller en Ciencias
en el año 1969, y obtuvo una beca para realizar
estudios de doctorado en la Universidad de
Brandeis en los Estados Unidos de América.
Ahí, fue expuesto a una realidad distinta.
Sus profesores trabajaban a dedicación
exclusiva, es decir destinaban todo su tiempo
a la labor docente y de investigación, y se
contaba con gran cantidad de fondos de
investigación provenientes del estado y de
donativos. Todas las semanas se realizaban
conferencias, a cargo de profesores de
universidades y centros de investigación de
todo EEUU y de Europa. Además, debido a la
ubicación de Brandeis, Abraham pudo asistir
a conferencias en la Universidad de Harvard,
en el Instituto Tecnológico de Massachussets,
y en universidades como Boston y Tufts.
En 1972, aproximadamente a la mitad de su
período de estudios en Brandeis, obtuvo una
beca para asistir a un curso de tres meses
en los Laboratorios de Biología Marina
Woods Hole. Esta experiencia fue fabulosa
para Abraham, ya que pudo interactuar de
manera mucho más personal con cientícos
de renombre mundial.
En 1974 regresa al Perú y es nombrado
profesor a dedicación exclusiva en la Facultad
de Ciencias y Filosofía de la Universidad
Peruana Cayetano Heredia. Su objetivo central
era poder establecerse como investigador. Le
habían reservado un área de laboratorio, pero
ésta no cumplía con los requisitos necesarios.
Entonces, con nanciamiento obtenido
a través de familiares y amigos, logró
implementar el laboratorio con los equipos
que requería para realizar cultivos de células,
e incluso consiguió negociar un área mayor
de la que se le había asignado originalmente.
Obtener fondos de investigación era muy
difícil en ese tiempo, sobre todo de fuentes
locales. Tocó varias puertas a lo largo de 3 años
en nuestro país, pero no tuvo éxito. Luego,
apareció una gran oportunidad: el contacto
con la Fundación Internacional para la Ciencia
(IFS) basada en Estocolmo, Suecia, la cual
estaba enfocada en promover la investigación
original y el crecimiento cientíco en países
de medianos y bajos recursos. Para Abraham
fue decisivo el haber cruzado su camino con
ellos. Gracias a la IFS obtendría recursos para
continuar implementando su laboratorio e
investigar en productos naturales con función
cicatrizante a lo largo de aproximadamente 10
años. Un golpe de suerte inicial como él suele
decir, pero que indudablemente no podría
haberse consolidado en un nanciamiento a
largo plazo sin la calidad y la seriedad de su
trabajo.
Luego, entre las décadas de los 80 y 90,
Abraham tuvo la oportunidad de investigar
sobre el virus de sarampión con apoyo
de la Organización Mundial de la Salud,
las fundaciones Rockefeller y Kroc, los
Institutos Nacionales de Salud y la Agencia
para el Desarrollo Internacional de EEUU,
en colaboración con investigadores de las
Universidades Johns Hopkins y Alabama en
EEUU, y McGill en Canadá. Fue así que conoció
a Richard “Dick” Johnson, considerado el padre
de la neurovirología, un ser humano ejemplar
y amigo, experiencia que dejaría marca en
Abraham. Diane Grin, otra colaboradora en
el tema de sarampión, también mantendría
una amistad con Abraham a través de los años.
En la década de los 90 Abraham se asocia con
Walter Lewis de la Universidad Washington en
St. Louis, Missouri, obteniendo nanciamiento
Acta Herediana vol. 63, N° 1, enero 2020 - junio 2020
94
del Centro Internacional Fogarty de los
Institutos de Salud de EE.UU. para estudiar
plantas medicinales peruanas, en colaboración
con la Universidad de Dartmouth, el Museo de
Historia Natural de la Universidad Nacional
Mayor de San Marcos y las comunidades
aguarunas. Este fue el inicio de una línea de
investigación que continúa hasta el presente.
Gracias a ese nanciamiento y posteriores del
mismo Instituto Fogarty, así como fondos del
Instituto Stanley para la Investigación Médica
de EEUU, Abraham ha conseguido establecer
un banco de más de 1 000 extractos de plantas
con propiedades medicinales diversas,
recolectadas a lo largo y ancho del Perú, cuya
acción abarca el tratamiento del cáncer, de
enfermedades infecciosas y de enfermedades
del sistema nervioso.
Pero volvamos a 1987, la mitad del segundo
rectorado del Dr. Alberto Cazorla, tiempo
en el cual Abraham fue elegido decano de
la Facultad de Ciencias y Filosofía. Es en ese
período que se gestaría la construcción de los
Laboratorios de Investigación y Desarrollo
(LID) de la Universidad Peruana Cayetano
Heredia, edicio que en la actualidad lleva su
nombre.
En aquel entonces, los laboratorios que venían
alojando a los investigadores de la UPCH por
algo más de 20 años eran ambientes que no
habían sido diseñados para ello; y, además,
los grupos de investigación habían crecido en
número. Para Abraham era imperativo resolver
ese serio problema: la falta de instalaciones
adecuadas para realizar investigación. Él
estaba convencido de que, para que el capital
humano existente pudiera desarrollar su
máximo potencial, era indispensable proveerle
de infraestructura. Eso permitiría no sólo el
crecimiento profesional, sino que además
sería el terreno que permitiría retenerlo, y que
sentaría las bases para el crecimiento de la
investigación en la UPCH, lo que efectivamente
ocurrió, y de manera exponencial, en los
años subsiguientes. Como Abraham lo ha
mencionado alguna vez: “si uno quiere que
(los investigadores) compitan por fondos en las
grandes ligas, tiene que darles las herramientas
para ello”.
Pronto se encontraría con un nuevo reto. Si
bien el país contaba con excelentes arquitectos,
ninguno tenía experiencia en la construcción
de laboratorios de investigación. Es por ello
que Abraham decide involucrarse él mismo en
el diseño de estos, en la losofía de que no hay
nadie mejor que el propio usuario para denir
lo que necesita.
Otro desafío fue conseguir los fondos para
realizar la construcción. Pero había un punto
de partida, que fue la donación de 180 000
dólares por Cristina e Ismael Cobián Elmore
otorgada a la Facultad de Ciencias y Filosofía,
gracias a las gestiones del Dr. Alberto Cazorla.
Esto permitió que, en 1989, luego de algo más
de un año de arduo trabajo multidisciplinario
en la elaboración de los planos, se pudiera
hacer las primeras excavaciones, colocar los
cimientos y la estructura inicial del edicio,
proyectado a seis pisos, con 100 laboratorios
y 13 200 m
2
de área construida. Luego sería
necesario obtener más nanciamiento. En
1990, las gestiones con una constructora y el
grupo empresarial del que formaba parte,
además de nuevos donativos, conseguidos
principalmente por el propio Abraham, el Dr.
Alberto Cazorla, y el rector que lo sucedió,
el Dr. Róger Guerra García, permitieron
continuar con la edicación, equipar el primer
piso e inaugurar formalmente los Laboratorios
de Investigación y Desarrollo,. Esto ocurrió
en 1995 durante el Rectorado del Dr. Carlos
Vidal Layseca, y el Decanato en la Facultad de
Ciencias y Filosofía del Dr. Agustín Montoya
De la Cadena. En 1999 se construyó el segundo
Acta Herediana vol. 63, N° 1, enero 2020 - junio 2020
95
piso, en el año 2004 el tercer piso, en el 2009
el cuarto, y en el 2014 el quinto piso. Mucho
del nanciamiento provino de la Fundación
Cristina e Ismael Cobián, establecida en 1996.
El impacto de esta obra, dirigida y gestada a
lo largo de 30 años por Abraham, es enorme.
Actualmente se cuenta con cerca de 80
laboratorios en funcionamiento; y, es un lugar
donde no sólo se investiga, sino que se forman
nuevas capacidades.
Sentimientos de ese impacto fueron mostrados
en la ceremonia que le hizo la UPCH al
nombrarlo profesor emérito en el año 2016.
Citando a la Dra. Fabiola León Velarde,
rectora en ese entonces y actual presidenta
del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
(Concytec): “…Abraham…eres el académico por
excelencia…ese académico que hace una docencia
de calidad, que cuando le toca hacer gestión la hace
con responsabilidad…pero como si eso fuera poco,
has cumplido el rol de ingeniero, de arquitecto, de
maestro de obras…y nos dejas…los Laboratorios
de Investigación y Desarrollo…los laboratorios
más avanzados del país…lo que nos distingue,
lo que es nuestro sello, que es la posibilidad de
generar conocimiento en un ecosistema adecuado”.
Citando al Dr. Alberto Cazorla, quien fue
también artíce e impulsor de esta obra y que,
según reere, se la encomendó a Abraham
por ‘’dedocracia“, y lo “dejó hacer”: “Cada
vez que vengo (al LID)…me emociono…porque
insisto en que la dedocracia, cuando es hecha con
inteligencia…por gente inteligente, con buena
voluntad, tiene buenos resultados…No voy a
alabar a Abraham…todos sabemos lo que es él y lo
que vale
Cito también las palabras del Dr. Carlos
Bustamante cientíco peruano de renombre
mundial, Premio Southern 2004, “…gracias…
por toda la ayuda que nos has brindado para
establecer el laboratorio de moléculas individuales
en Lima” “quiero agradecerte por tu buena
disposición siempre, de ser un apoyo para los
jóvenes investigadores en el Perú”.
Daniel Guerra, discípulo de Carlos Bustamante
y Coordinador del Laboratorio de Moléculas
Individuales del LID, dene su línea de
estudio, las moléculas individuales, “como una
singularidad, dentro de otra singularidad”,
es decir un campo cientíco revolucionario,
trabajado dentro de un ambiente de
investigación también revolucionario. No se
equivoca al decir que la construcción de los
Laboratorios de Investigación y Desarrollo ha
sido “un salto cuántico” en el desarrollo de la
UPCH.
Mirko Zimic, investigador reconocido a nivel
internacional por sus aportes en el desarrollo de
tecnologías de bajo costo para el diagnóstico de
enfermedades, apunta el valor de poder trabajar
en un ambiente catalizador que permite tener a
expertos de diversas disciplinas interactuando
y resolviendo problemas cientícos de manera
sinérgica, “una plataforma de estudios
multidisciplinarios”.
Edward Málaga, quien ha validado el uso del
pez cebra como modelo para comprender mejor
ciertas enfermedades neurodegenerativas,
como el mal priónico y la enfermedad de
Alzheimer, reere que el apoyo de Abraham
a través del LID ha sido clave para la
implementación de su laboratorio, único en el
país.
Francisco Villafuerte, discípulo del Dr. Carlos
Monge Cassinelli y actual líder de estudios en
siología de altura en la UPCH considera al
LID como un entorno multiplicador: el ver que
existe un ambiente en que se puede investigar de
manera exitosa atrae a nuevos investigadores,
el éxito de los investigadores da conanza
a las agencias nanciadoras para otorgar
Acta Herediana vol. 63, N° 1, enero 2020 - junio 2020
96
fondos, y todo esto nalmente desemboca en
la multiplicación del conocimiento cientíco.
Jorge Arévalo, investigador exitoso y docente
comprometido con el desarrollo de la ciencia
en el Perú indica que Abraham “...no sólo es el
protagonista de la construcción física que se llama
LID, sino que su visión marca un hito al convencer
a otras personas acerca de la necesidad de…(contar)
con instalaciones que alberguen cientícos que
destaquen en los círculos de investigación más
exigentes a nivel mundial.” “El LID congrega a
una serie de “investigador(es) apasionado(s) que
creen en lo que hacen y están compitiendo con
altas expectativas” “denitivamente el LID nos
permite…aspirar a seguir siendo la universidad
que genera conocimiento, la institución que mejora
al Perú; (y al Perú) a ser un país que aporta a la
humanidad”.
Pero hay algo más; Abraham no solo fue la pieza
clave en la construcción de los Laboratorios
de Investigación y Desarrollo sino que actuó
como su director desde el año 1995 en que
fue inaugurado hasta el presente año, ya que,
según el reglamento vigente, su condición de
profesor emérito no le permite continuar en
dicho cargo.
Además, como lo indica Gustavo Gonzáles,
exdecano de la Facultad de Ciencias y Filosofía
de la UPCH y actual presidente de la Academia
Nacional de Ciencias “Abraham no solo es el
LID”, destacando su trabajo como gestor de
políticas desde la posición de presidente de la
Academia Nacional de Ciencias en el período
2015-2018, durante el cual, entre muchas
cosas, trabajó en el desarrollo de un programa
de aprendizaje y motivación en ciencia para
alumnos y profesores de colegio, así como
en iniciativas para el empoderamiento de la
mujer cientíca. Gustavo ha elaborado una
metáfora biológica para denir a Abraham, la
cual comparto con ustedes: “Abraham Vaisberg
era una molécula individual que se convirtió en una
célula madre, para transformarse en un arquitecto
de la ciencia”.
Para nalizar, quiero citar al propio Abraham,
en su posición de director del LID, dirigiéndose
a los estudiantes:
Nosotros tenemos charlas, conferencias, casi
todos los viernes. Mas del 50% de esas charlas
son dadas por gente que trabaja en universidades
del primer mundo, haciendo investigaciones
sumamente interesantes…(asistan), infórmense;
a pesar de que posiblemente no entiendan el
100% de lo que se habla en esa charla, aprenden
de metodología de ciencias;…(y) al que le
gusta soñar despierto, sueña despierto, porque es
un ambiente especial para soñar despierto e idear
experimentos…, yo lo he hecho”.
…No piensen en pequeño, siempre piensen en
grande….Cuando piensan en pequeño, a la larga
es un desperdicio, porque van a tener que
demoler para poder volver a construir; la idea es
siempre pensar en grande”.
Espero que hayan disfrutado como yo este
intento de resumir la esencia de las vivencias
y de la visión transformadora de Abraham
Vaisberg en el campo de las ciencias; que,
fuera de catalizar sus aportes directos al
conocimiento humano, ha permitido la
multiplicación de capacidades y ha sentado un
modelo de cómo hacer ciencia de vanguardia
en nuestro país.
Abraham es una de esas personas que ayudan
a crear un mundo mejor.
Por su trayectoria de vida, cargada de labor
admirable, generosa y única impulsando la
formación de capacidades, la captación de
talentos y allanando el camino para que nuevas
generaciones de investigadores e innovadores
Acta Herediana vol. 63, N° 1, enero 2020 - junio 2020
97
desarrollen al máximo su potencial, nos
complace que a Abraham Vaisberg se le
otorgue el Premio Southern-Perú y la Medalla
Cristóbal de Losada y Puga en el campo de las
ciencias 2019.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Arregui L Alberto. Richard T. Johnson, MD (1931-2015). Rev
Neuropsiquiatr. [Internet]. 2016 Jan [citado 2019 Nov 28];
79(1): 71-72. URL disponible en:http://dev.scielo.org.pe/scielo.
php?script=sci_arttext&pid=S0034-85972016000100011&lng=pt.
2. Facultad de Ciencias y Filosofía. Archivo de videos. Homenaje
al Dr. Abraham Vaisberg. Diciembre 2016.
3. Porturas Plaza Fernando. Origen de la Universidad Peruana
Cayetano Heredia. Rev Med Hered. [Internet]. 1999 Oct
[citado 2019 Nov 28]; 10(4): 151-166. URL disponible en: http://
www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1018-
130X1999000400006&lng=es.
4. Vaisberg A. Presentación TEDx Tukuy 2014. URL disponible
en: https://www.tedxtukuy.com/charlas-2014
corresPonDencia:
carla.gallo@upch.pe
Fecha de recepción: 09-12-2019.
Fecha de aceptación: 20-02-2020.