1 Médico internista. Profesor principal. Hospital Nacional Arzobispo Loayza. Universidad Peruana Cayetano Heredia.
RecoRdando a Felipe pinglo alva,
el BaRdo inmoRtal
Recalling to Felipe Pinglo Alva, The Immortal Bard
Oscar G. PamO reyna
1
Felipe Pinglo Alva (1899-1936)
IntrOduccIón
H
ablar de Felipe Pinglo signica referirse
a la música criolla, al vals peruano, a la
vida del hombre común del Cercado
de Lima nisecular del siglo XIX y primeras
décadas del siglo XX, de esa Lima que se fue,
de aquel submundo de las familias de obreros
y trabajadores manuales, y también de la
incipiente clase media.
Hablar de Pinglo es referirse básicamente al
vals ya que este fue el género que cultivó de
manera preferencial. Pinglo fue compositor,
cantautor y poeta; y, le compuso al amor y al
desamor, a los viejos tiempos y a la modernidad,
a la alegría y a la tristeza, a la vida misma aún
en sus nimiedades.
La versión que se presenta es un resumen de la
vida y obra de Pinglo desde el punto de vista
histórico social.
(1)
1 Los trabajos de Sarmiento y Borras, ver la bibliografía,
son excelentes estudios analíticos de la letra y música en las
composiciones de Pinglo.
el Perú y el mundO que cOnOcIó PInGlO
Pinglo nació cuando el Perú restañaba sus
heridas a consecuencia de la infausta Guerra
del Pacíco. Le tocó vivir un país que entraba
en la modernidad y que se vería sacudido por
grandes reclamos sociales.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
32
El alumbrado eléctrico público había llegado
a Lima en 1886 y el tranvía eléctrico entró en
funciones en 1906. Los automóviles empezaron
a circular en Lima, el primero lo hizo en 1903.
Y, en 1925 se inició la transmisión radial.
En lo político, el país salía del militarismo para
entrar en sucesivos gobiernos democráticos
con una aparente estabilidad política y de
crecimiento económico: Nicolás de Piérola
(1895-1899), Eduardo López de Romaña (1899-
1903), Manuel Candamo (1903- 1904), Serapio
Calderón 1904, José Pardo (1904-1908), Augusto
Leguía (1908-1912), Guillermo Billinghurst
(1912-1914), Oscar Benavides (1914-1915)
y José Pardo (1915-1919). Estos gobiernos
elegidos por la oligarquía nacional fue lo
que el historiador Jorge Basadre denominó la
República Aristocrática, período caracterizado
por la agroexportación como principal fuente
de ingreso del país, por la dependencia del
capital inglés, por la incipiente minería y
explotación del petróleo, por un centralismo a
ultranza y un total desinterés por el Perú rural.
Fueron décadas en que el Perú solo se miraba
el ombligo.
Las décadas siguientes se caracterizaron por
gobiernos dictatoriales, gobiernos de facto y
retornos democráticos: Augusto Leguía (1919-
1930), Luis Sánchez Cerro (1930-1931 y 1931-
1933), Oscar Benavides (1933-1939) y Manuel
Prado (1939-1945). Este período se caracterizó
por la gradual dependencia del capital
norteamericano y los grandes empréstitos.
Los estudiantes universitarios hicieron eco del
Grito de Córdoba y la Reforma Universitaria
de 1918. Se fundó la primera universidad
particular, la Ponticia Universidad Católica
del Perú, en 1917. Los diversas y sucesivas
revueltas de los estudiantes universitarios
sanmarquinos reformistas y contra los
gobiernos de turno devinieron en la clausura
de la universidad en 1932-1935.
Los movimientos de los trabajadores
consiguieron la jornada laboral de ocho horas.
La respuesta a la oligarquía generó la fundación
de la Alianza Popular Revolucionaria (APRA)
en 1924 por Víctor Raúl Haya de la Torre y del
Partido Socialista del Perú en 1929 por José
Carlos Mariátegui. La matanza de los apristas
sublevados de Trujillo en 1932 (“El año de la
barbarie”) por las fuerzas militares durante el
gobierno de Sánchez Cerro.
Se delimitaron las fronteras con nuestros
vecinos: Tratado de Límites con Brasil y Bolivia
en 1909. Tacna fue devuelto por Chile al Perú
en 1929, perdiéndose denitivamente Arica y
Tarapacá. Conicto con Colombia y pérdida
de Leticia en 1935. Conicto con Ecuador en
1941.
En lo internacional, ocurrieron notables
acontecimientos como la Primera Guerra
Mundial, de 1914-1919; la pandemia de la
“Gripe Española, de 1919-1923; el “crack” de
la Bolsa de Nueva York y sus repercusiones a
nivel mundial e; la Guerra Civil Española, de
1936-1939; y, la Segunda Guerra Mundial, de
1939-1945.
la músIca crIOlla
La música criolla, para algunos autores solo
se reere al valse o vals y la polka o polca.
Después fueron incorporados otros géneros:
zamacueca, marinera, tondero, festejo, landó,
entre otros. Por su origen, la música criolla es
música costeña, o música limeña, hablando
estrictamente. Esta sería, después, música
nacional o música peruana.
Se dice y se escribe vals o valse. Lo de criollo
enfatiza en su nacimiento en estas tierras, pero
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
33
es suciente decir vals o valse en lugar de vals
criollo, a no ser que se requiera enfatizar en
su origen. Algunos preeren valse antes que
vals; y, los verdaderos criollos jamás dijeron o
aceptaron el diminutivo valsecito criollo” ya
que para ellos el valse es un sentimiento de
amor o, mejor aún, de tristeza, de la negritud
del barrio de Malambo (Rímac) tal como los
blues de los negros norteamericanos.
(2)
Entre nosotros, y entre otras acepciones, criollo
es el “cultor que escucha, conoce su historia
musical y comprende una variedad de géneros,
como los valses, las polcas, las marineras, los
tonderos, las zañas, entre otros.”
(3)
El vals tiene su origen en el waltz que llegó de
Europa al Perú en principios del siglo XIX, que
bailado en los salones de la clase acomodada
se fue modicando hasta tomar forma del
vals que conocemos y bailado entre la clase
pobre, y que de grandes desplazamientos en
amplios salones pasó a pequeños pasos con
cierto balanceo corporal.
(4)
Si bien conserva
el tres por cuarto del vals vienés tiene mayor
inuencia de la mazurca, de la jota aragonesa y
algunos giros de la zarzuela y la ópera italiana
ligera, con el agregado de la música negra.
(5)
Y, por la coreografía, el vals criollo también se
parece a la mazurca antes que a la jota. Nuestro
vals criollo se formó en las últimas décadas del
siglo XIX y fue consolidándose como género
musical en las primeras décadas del siglo XX.
Este fenómeno también sucedió en México,
Centroamérica, Ecuador, Chile, Uruguay y
Argentina, con marcadas variantes locales que
los distinguieron.
Por jarana se entiende una diversión bulliciosa
y alborotada, aunque los antiguos cultores de
la música criolla lo emplearon como sinónimo
2 Acosta Ojeda, Manuel. 2015: 110.
3 Cáceres Álvarez, Luis. 2017:60.
4 Acosta Ojeda, Manuel. Op. cit. 2015: 105-110.
5 Jáuregui, Eloy. 2011:30.
de marinera.
(6)
La jarana que se celebraba por
un cumpleaños duraba por lo menos siete días:
la antevíspera, la víspera, el santo, la joroba,
la corcova, el respinguete y el anda y vete.
(7)
Hubo quienes celebraban dos días más: la
octava y la novena (“de las comadres”).
(8)
Y,
entre la víspera y el santo, a la medianoche,
se llevaba a cabo la serenata, donde un grupo
de allegados con voz y guitarras saludaban al
santo por la llegada de su cumpleaños. Seguía
el convite del santo, esto es comida y bebida,
y también unos bailes. Para los moderados,
la jarana tenía cuatro fechas: serenata, santo,
corcova y recorcova.
(9)
El vals, y por ende el criollismo, nació en los
Barrios Altos, el sector este del Cercado, y se
extendió hacia el barrio del Cuartel Primero
o Monserrate, Malambo o el Rímac (“Bajo el
puente”) y el nuevo distrito de La Victoria.
Posteriormente, comprendería los distritos de
Breña, Lince y a la ciudad portuaria del Callao,
siempre sectores populosos. A mediados de
la década de 1930 tendría difusión nacional
gracias a las radioemisoras.
La población de estos barrios era mestiza,
pero este mestizaje, aunque no exclusivo, fue
mayor con los afrodescendientes que con los
andinos y los chinos. Estos últimos habían
llegado a las ciudades de la costa peruana en
1849 y los andinos recién “bajarían a Lima”
en la década de 1950, lo que se llamaría el
“desborde popular”.
(10)
Nunca fue más cierto
aquella frase de autor anónimo “En el Perú,
quien no tiene de inga tiene de mandinga”.
Con los afrodescendientes, ya no se usaba
6 Chocano Paredes, Rodrigo. 2012: 40.
7 Cáceres Álvarez, Luis. 2017:16.
8 ¿Cómo se celebraban los cumpleaños en la Lima de antaño?
https://blog.derrama.org.pe/como-se-celebraban-los-
cumpleanos-en-la-lima-de-antano/
9 Durand Flórez, José. 1995: 32.
10 Alusión a la obra del antropólogo peruano José Matos Mar
(1921-2015): Desborde Popular y Crisis del Estado (1980).
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
34
la clasicación racial colonial de zambo,
mulato, cuarterón quinterón, etc.; ahora, eran,
simplemente, “zambo”, “negro”, “moreno”,
“sacalagua”, “del pelo”. Y, para las otras
pieles había “chino”, “achinado”, “del ojo”; y,
“cholo”, “serrano”, “paisano”, “blanquiñoso”,
“blanquito”, etc. Estas denominaciones tenían
signicados que iban desde lo amical hasta
lo peyorativo, dependiendo del contexto de
cuándo y cómo se decían. Además, no siempre
los individuos se reconocían como tales y
muchas veces decían ser “blancos” antes que
“mestizos”. Por otro lado, el tener ancestros
en la ciudad capital o no tenerlos ya hacía
un distingo: “limeños” y “provincianos”.
Estos últimos eran “costeños”, “serranos” y
“chunchos” o “charapas” según su procedencia
de la costa, sierra y selva, respectivamente.
El criollismo era una forma de vida. El
trabajador, luego de la jornada laboral, se
reunía con sus amigos en casa de uno de
ellos, esto era alternante, en los callejones y
solares, para rasgar una guitarra, idealmente
una primera y una segunda, y una voz, lo que
era suciente para cantar los viejos valses y
los nuevos.
(11)
Las casas, casas de vecindad,
eran precarias en espacio y en los servicios
higiénicos, “callejón de un solo caño”.
(12)
Había
comida y se solía beber ron, que era la bebida
alcohólica de moda y por ser barata.
(13)
Muchas
veces estas reuniones terminaban después de
11 Para el vals, el cajón fue incorporado a nes de la década de
1940.
12 No existía una marcada segregación residencial. La “gente
decente” vivía en el centro de Lima pero también era común
la existencia de casas señoriales al costado de callejones en los
sectores aledaños, lo que era frecuente en el Cuartel Quinto de
la ciudad, que era el área denominada Barrios Altos. Lo de
“altos” se reere a que las viviendas estaban situadas en la
parte alta o elevada de la ciudad.
13 La producción del aguardiente de caña (“cañazo”) era mayor
que la del aguardiente de uva (pisco). El “cañazo” solía se
rebajado con agua gaseosa. El pisco también, así: “res” (pisco
quebranta con ginger ale, limón y hielo). Por otro lado, la “lija”
era un vino corriente (“rascabuche”) mezclado con agua
gaseosa. Pero, también se tomaba el pisco y el ron puros.
la medianoche y la idea era pasarla bien, no
emborracharse. Por supuesto que algunas
veces hubo excesos y esto fue lo que le dio
una pátina de bohemia a la jarana pero que en
realidad no lo fue, o lo fue parcialmente, por una
sencilla razón: en la mañana siguiente había
que trabajar. Por esto, repito, el criollismo fue
una forma de vida de la clase trabajadora, no
teniendo o habiendo muy pocas maneras para
distraerse de los agobios de la vida cotidiana.
Por otro lado, las clases alta y media, y la
popular también, se divertían con la música
de moda, la foránea, especialmente de la
norteamericana (fox trot, one step, charleston) y
el tango.
Se resalta la gura de Alejandro Ayarza
Morales, “Karamanduka” (1884-1955), militar
y compositor, quien fue un díscolo personaje
de la clase alta que con un grupo de congéneres
formó el grupo “La Palizada” y se dedicó a
disfrutar y, con ello, propalar la música criolla.
Su hermana, Mercedes Ayarza Morales (1881-
1969), fue una notable concertista de piano,
profesora de música y canto, compositora y
recopiladora del acervo criollo, como de los
“pregones”, entre otros.
Otro hecho importante de la época fue
cuando los intérpretes Eduardo Montes
Rivas y César Augusto Manrique fueron
invitados por la Columbia Phonograph &
Company a sus estudios en Nueva York,
EE.UU., a donde viajaron en noviembre
de 1911. Montes y Manrique hicieron 182
grabaciones: 31 marineras, 9 tonderos, 20
valses, 2 mazurkas, 7 polcas, 41 yaravíes, 31
tristes, 23 canciones y 8 piezas teatrales, más
10 piezas para bandas.
(14)
Por esta pequeña
proporción de valses grabados, algunos
autores consideran que Montes y Manrique no
fueron los verdaderos “Padres del criollismo”
14 Rohner, Fred. 2018:321-332.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
35
como se les ha denominado. Esto es relativo,
ambos intérpretes tuvieron muchos años
de actividad artística propalando la música
criolla.
(15)
El interés de la empresa discográca
norteamericana por la música popular peruana
obedecía al hecho de que deseaban ampliar su
mercado de gramófonos y victrolas.
Los estudiosos del criollismo distinguen tres
momentos en su desarrollo inicial. El primero
que es la llamada Guardia Vieja, que va desde
las últimas décadas del siglo XIX hasta 1930
aproximadamente; segundo, un período de
indenición; y, tercero, la Generación de Pinglo.
(16)
La Guardia Vieja se reere a los compositores
y cantantes del criollismo primigenio. De esta
época se tiene a Romualdo Alva Reyes, Emilio
Germán Amézaga Llanos, Alejandro Ayarza,
José Ayarza y Gómez Flores, Rosa Mercedes
Ayarza, Nicanor Casas Aguayo, Juan Francisco
Ezeta, Pedro Fernández, Luis A. Molina, Oscar
Molina Peña, Eduardo Recavarren García
Calderón, Alejandro Sáenz, Fernando Soria,
Guillermo Suárez Mandujano, José Benigno
Ugarte, entre otros.
(17)
La denominación Guardia
Vieja es posterior, porque los protagonistas
de esa época no se hacían llamar ni fueron
llamados así.
El período de indenición se superpone entre
la Guardia Vieja y la Generación de Pinglo, y
ocurrió entre las décadas de 1920 y 1940. Se
reere a la intromisión de la música foránea en
el gusto popular, lo que sucedió con el fox trot,
one step, tango y, después, con las rancheras.
No sólo intervinieron en las preferencias del
público sino también de los compositores
15 César Augusto Manrique La Torre (1878-1966) y Agustín
Eduardo Montes Rivas (1874-1939), ambos de los Barrios Altos,
formaron un dúo musical de destacada presencia en las jaranas
de la época.
16 Lloréns Amico JA y Chocano Paredes R. 2009: 125-148.
17 Zanutelli, Manuel. Canción criolla:…1999: 18-27
Jarana limeña en los años 1920s, según composición de
Mariano Osorio
Jarana, Camilo Blas
criollos quienes utilizaron los acordes y
compases para crear valses.
Pinglo fue el compositor más importante entre
1930 hasta la década de 1950. Hubo otros
compositores entre los que mencionaremos a
Pedro Bocanegra (1890), Carlos Saco (1894),
Víctor Correa Márquez (1895), Manuel
Covarrubias (1896), Filomeno Ormeño (1899),
David Suárez Gavidia (1900), Nicolás Wetzell
(1900), Alberto Condemarín (1900), Luis De la
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
36
Cuba (1902), Juan Sixto Prieto (1902), Eduardo
Márquez Talledo (1902), Laureano Martínez
Smart (1903), Manuel Raygada (1904), Samuel
Joya (1905) y Alcides Carreño (1905).
(18)
Ellos
conformaron lo que después se denominó la
Generación de Pinglo. Por supuesto que la fama
de Pinglo como excelente compositor perdura
hasta la actualidad.
En sus inicios, la música criolla se desarrolló
de manera desorganizada dada las diferentes
formaciones artísticas de los compositores,
intérpretes y arreglistas. Con el transcurrir del
tiempo, surgirían controversias respecto de las
autorías de las canciones, de las letras que eran
modicadas por los intérpretes y también de
los cancioneros que cambiaban o corregían los
títulos de las canciones.
(19)
nOta BIOGráfIca
Julio Felipe Federico Pinglo Alva, el
representante más importante de la música
criolla en el Perú, nació el 18 de julio de 1899,
en la Calle del Prado N° 500 (actual jirón Junín
N°1456), de los Barrios Altos, en el Cercado
de Lima. Fue bautizado en la Parroquia de
Santiago del Cercado. Sus padres fueron Felipe
Pinglo Meneses, profesor, y María Florinda
Alva, quien murió siete días después por
complicaciones del parto.
(20)
El apellido Pinglo no es de origen español.
(21)
Los Pinglo se concentran en Lambayeque, costa
norte del país. Tal vez sea una deformación
de Pingo, otro apellido de origen incierto y
muy frecuente en Lambayeque. También se
ha dicho que el origen del apellido Pinglo es
chino, como una corrupción de Ping Loo.
(22)
18 Zanutelli, Manuel. Op. cit. 1999: 30-45.
19 Leturia Chumpitazi, José. 2018: 111-124.
20 Velasco Asenjo, Lita; 2016.
21 Geneall.
22 Según Manuel Zanutelli, el primero que manifestó que el
apellido Pinglo era de origen chino fue el autor César Miró.
La ausencia del epicanto en los ojos de Pinglo
contradice un supuesto origen oriental.
(23)
Criado por sus tías, la vida infantil de Pinglo
fue la de cualquier niño pobre. Pinglo realizó
estudios en la Escuela Fiscal de los Naranjos e
inició los secundarios en el Colegio Guadalupe,
en el año de 1912.
(24)
El año de 1914 fue un año muy importante en la
vida del joven Pinglo. Habiendo interrumpido
sus estudios, pues no concluyó el segundo
año de la secundaria, y alejándose de su casa,
Pinglo se desempeñó en varios trabajos. Es en
esta época en que tiene dos amigos mayores
que él, los músicos Víctor Correa y Nicanor
Casas, quienes lo introdujeron en el mundillo
de la música criolla, iniciando sus escarceos
musicales con el rondín y la auta.
(25)
Su primer contacto con la música debió ser
con las retretas que la Banda de Gendarmes
(después Guardia Republicana) llevaba a cabo
los nes de semana en la Plaza de Santa Ana,
en el corazón de los Barrios Altos, desde inicios
del siglo XX.
Su primer contacto con la música debió ser
con las retretas que la Banda de Gendarmes
(después Guardia Republicana) llevaba a cabo
los nes de semana en la Plaza de Santa Ana,
en el corazón de los Barrios Altos, desde inicios
del siglo XX.
Llegó a practicar el fútbol de nivel amateur el
cual dejó por una cojera que lo acompañaría en
adelante, “hasta que se lesionó los meniscos cuando
Esto no ha sido conrmado; sin embargo, debemos mencionar
que existe una ciudad Pinglo, en la provincia Quangsi, China.
23 Epicanto, del latín epi y canthus, esquina del ojo. Es el pliegue
del párpado superior que cubre el ángulo interno de ojo. Es
una característica fenotípica de los orientales.
24 Mejía, Darío; 2011.
25 Leyva Arroyo, Carlos A.; 1999: 29-33.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
37
jugaba por el Atlético Lusitania”, según armó su
hija.12
(26)
Compuso su primer vals, Amelia, en 1915.
Se hizo conocido en las jaranas llevadas a
cabos por las noches en casas de cultores de
la música criolla en los Barrios Altos. Las
letras de sus composiciones fueron publicadas
en los cancioneros y, poco a poco, fueron
interpretadas por cantantes no solo en las
jaranas sino también en los cine-teatros. Pinglo,
denitivamente que fue un autodidacta; y, se
dedicó a escribir las letras de sus canciones en
sus ratos de ocio. Gran admirador de Rubén
Darío y de Leonidas Yerovi. A este último le
compuso un vals.
(27)
Llegó a conocer a José Carlos Mariátegui
cuando este vivía cerca en los Barrios Altos,
en la década de 1920. Esta etapa romántica de
Pinglo no le interesó a Mariátegui; y, cuando
Pinglo desarrolló su temática social en la
década de 1930, Mariátegui había muerto.
(28)
(29)
Fue comentarista deportivo en 1923 para
después recalar como empleado en la Empresa
del Gas.
En 1926, Pinglo contrajo matrimonio con
Hermelinda Rivera y tuvieron dos hijos:
Carmen y Felipe.
(30)
El general José Luis Salmón
y su esposa María Jesús Hidalgo fueron sus
padrinos de boda. El general Salmón lo llevó
a trabajar como empleado en la Dirección
General de Tiro, dependencia del entonces
26 Sobre su cojera se ha especulado en el sentido de que ocurrió
a consecuencia de un traumatismo jugando fútbol. Para el
doctor Amador Carcelén, la cojera de Pinglo se explica porque
era portador de tuberculosis osteoarticular de la rodilla.
27 El vals Leonidas Yerovi fue escrito en 1919, en memoria del
desaparecido trágicamente escritor, poeta y dramaturgo
Leonidas Yerovi Douat (1881-1917).
28 José Carlos Mariátegui La Chira (1894-1930). Prolíco escritor,
periodista y pensador marxista.
29 Mejía, Darío. 2015.
30 Existe controversia con la fecha exacta del matrimonio Pinglo-
Rivera.
Ministerio de Guerra, en el local del Polígono
Muñiz, en el Rímac.
(31)
(32)
La difusión de la música criolla por las radios
demoró. Si bien es cierto que la primera estación
de radio, OAX, se estableció en Lima en 1925,
esta no prosperó por problemas económicos.
Recién a partir de 1933 se crearon nuevas
radioemisoras que se encargarían de difundir
noticias y esparcimiento a nivel nacional; y, en
1937, aparecería ocialmente Radio Nacional
del Perú.
(33)
(34)
Fue así como Pinglo se hizo
conocido en el mundillo de la emergente
música criolla en los barrios populares del
Cercado, estando presto a participar en cuanto
evento musical jaranero se le invitara.
En 1929, el cantante Alcides Carreño estrenó
el vals Rosa Luz de Pinglo en el Teatro Apolo,
de la Plaza Italia, que fue un éxito; y, en 1930
estrenó la canción más celebrada de Pinglo,
Luis Enrique, El Plebeyo, en el Teatro Alfonso
XIII, en el Callao.
En 1932, Pinglo tuvo un distanciamiento
conyugal y se fue a vivir a la casa de la familia
Valdelomar en La Victoria, nuevo barrio
popular. Fue en esta época en que se aceral
club de fútbol Alianza Lima y le compondría
Viva el Alianza, señores y a los jugadores
aliancistas Alejandro Villanueva, Demetrio
Neyra, Juan Rostaing, Arturo Fernández, Juan
Valdivieso y Víctor Lavalle.
(35)
(36)
31 Cuando el general José Luis Salmón fue nombrado Ministro de
Guerra, designó a Pinglo como su secretario privado.
32 Zanutelli, Manuel. Felipe Pinglo…1999: 47.
33 Bustamante, Emilio. Los primeros veinte años de radio
en el Perú. Contratexto. 2005; 13: 206-220.
34 En aquel entonces, las grabaciones en las radioemisoras se
hacían en vivo y en directo.
35 Leturia Chumpitazi, José Antonio; 2009.
36 Viva el Alianza señores, como polca en 1930 y como marinera en
1932. Para Fernández, Valdivieso y Lavalle compuso el vals Los
tres ases.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
38
Pinglo tuvo un reconocimiento general entre
los que se dedicaban a la música criolla. Así,
se publicó el vals Felipe Pinglo, donde se indica
a Antonio Ferrer como autor de la letra y a
Filiberto Hidalgo como intérprete:
Tus notas son tristes, hacen meditar,/nos traen
recuerdos de tiempos atrás;/el pueblo enmudece
al oír tus canciones/que son recuerdos de tu
pasado/que el destino te supo deparar. Y yo
 conado podré decir/Felipe Pinglo dice verdad,/
compositores como tú/en la vida nunca habrán,/
porque tu pones en tus notas/toda tu alma y tu
corazón.
(37)
(38)
Pinglo retornó a los Barrios Altos en 1934,
consagrado ya como compositor. Hacia nes
de 1934 compuso De vuelta al barrio, que
fue publicado en la edición No. 1027 de «El
Cancionero de Lima», del 18 de enero de 1935,
edición con la cual se celebraba el Cuarto
Centenario de la Fundación de Lima.
(39)
Su hija Carmen Pinglo lo recordaba como un
buen padre: el matrimonio Pinglo Rivera, pese
a la diferencias de carácter de los esposos, era muy
unido”, Era una persona muy afectiva, caritativa,
muy humilde”, “…tenía un temperamento apacible,
tranquilo, a veces callado y melancólico, muy
consentidor con sus hijos.”, A veces se reunía con
sus amigos. Era bohemio, jaranero, pero nunca dejó
de llegar a casa. Podía quedarse fuera hasta las dos
o tres de la madrugada. A veces se amanecía, pero
siempre regresaba a casa, nunca dejó de venir a
dormir.”
(40)
Pinglo era una persona ordenada;
además, era un católico muy creyente y
37 El Cancionero de Lima, N° 903, página 6, de setiembre de 1932.
38 Canción de título “Felipe Pinglo”, dedicada al maestro en la
plenitud de su vida - año 1932. URL disponible en: https://
nemovalse.wordpress.com/2018/04/15/cancion-de-titulo-
felipe-pinglo-dedicada-al-maestro-en-la-plenitud-de-su-vida-
ano-1932/
39 Mejía, Darío. La vuelta al barrio…2015.
40 Velasco Asenjo, Lita. Op. cit.
practicante, devoto de la Virgen del Carmen, a
decir de quienes lo conocieron.
Frecuentador de las jaranas barrioaltinas,
la salud de Pinglo se fue deteriorando. En
realidad, su enfermedad no tenía que ver con
una vida de trasnochador sino, simplemente, se
contagió y enfermó. Sus síntomas principales
fueron la tos y el cansancio, después vendría
la hemoptisis. Por aquel entonces, era común
enfermar de la peste blanca o consunción, como
también llamaban a la tuberculosis.
(41)
El 15 de abril de 1935, Pinglo fue hospitalizado
en la sala Odriozola, cama Nº 27, del Hospital
Dos de Mayo de Lima. Allí, el periodista Juan
Francisco Castillo Alatrista, del semanario
Cascabel, lo entrevistó en su lecho de enfermo. El
sábado 25 de abril salió publicado la entrevista
que le hiciera el periodista Castillo en Cascabel,
página ocho del número 81.
(42)(43)
Pinglo solicitó su alta el 27 de abril de ese año al
no aceptar un procedimiento quirúrgico que le
recomendaron los médicos. Sintiendo cercana
a la muerte, Pinglo escribió la letra del vals
Hermelinda, pero sin música porque ya no tuvo
tiempo, el cual dedicó a su esposa Hermelinda
Rivera.
(44)
Su resquebrajada salud concitó la atención de sus
amigos quienes lo visitaron frecuentemente en
sus últimos días. Más aún, Eduardo Villanueva,
conocido como “El Cantor Proletario”, compuso
el vals El Maestro, publicado en El Cancionero
de Lima, 1095, del 8 de mayo de 1936, y que
después sería cantado en cines y teatros.
(45)
41 Pamo Reyna, Oscar G.; 2014; 27 (3): 148-154.
42 Zanutelli, Manuel. Felipe Pinglo…Op.cit. 1999: 51-60.
43 Mejía, Darío. Noticias de Lima…
44 La letra de este vals Hermelinda compuesto pocos días antes de
morir nunca fue dada a conocer por la Sra. Hermelinda
Rivera. Se suele confundir con el otro vals Hermelinda atribuido
al compositor Alberto Condemarín.
45 García Alva, José Félix; 2018.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
39
En casa, era asistido por su amigo el médico
Ernesto Melgar. Pinglo falleció el 13 de mayo de
1936, a las cinco y media de la mañana, en su casa
de la calle Penitencia, actualmente en Jr. Paruro
N° 232.
(46)
Su velatorio fue muy concurrido, y
el traslado del féretro al Cementerio Presbítero
Maestro fue multitudinario. Fue enterrado en
el cuartel Santa Rebeca, nicho 63.
(47)
La muerte de Pinglo pasó desapercibida para
el Perú ocial. Solo fue sentida, y se guardó
luto, en los barrios populosos de Lima, donde
nació y creció la música criolla.
la muerte de PInGlO
¿De qué murió Pinglo?
Siempre se dijo que Pinglo murió a consecuencia
de la tuberculosis. Muchos años más tarde, su
hija adujo que de haber sido cierto hubiera
contagiado a otros miembros de la familia y
que, además, no estuvo internado en la sala de
los tuberculosos, la sala Santa Rosa. Estas dos
armaciones son relativas ya que no siempre
todos se contagian y porque había tal cantidad
de tuberculosos que estos eran internados
en cualquier sala de medicina del hospital.
Recordemos que la tuberculosis campeaba
en todo el mundo. Que, tener tuberculosis era
un estigma que los enfermos y sus familiares
trataban de ocultar. Por algunos pasajes de
la entrevista que se le hiciera en el semanario
Cascabel podemos inferir que Pinglo arrastró
su enfermedad por varios años, que además
tenía compromiso pleural y que las operaciones
46 La calle Penitencia comprendía las actuales primera, segunda y
tercera cuadras del Jr. Paruro.
47 Posteriormente, el 26 de octubre de 1958, sus restos fueron
trasladados a la tumba donde se encuentra actualmente, y
con un busto del escultor Artemio Ocaña. Dicha tumba tiene
un enrejado de hierro con las primeras notas de El Plebeyo y
fueron construidas y donadas por Nicomedes Santa Cruz,
afamado decimista, que era herrero de profesión.
ofrecidas se referían a la colapsoterapia con
sección del nervio frénico:
“Se trata de un bohemio. De un hombre que hace
ocho años viene luchando con la enfermedad.
Mejor, con las enfermedades. Su organismo
resentido ha terminado por arrastrarlo al
hospital.”…[…]…“Pinglo se siente mejor. Nos
asegura que está algo así como en preparación
para que le hagan tres operaciones. Cuando da la
noticia, de aquellas tres operaciones, ni se
inmuta. Es una cosa sencilla.”…[…]…“Pinglo
nos da explicaciones de la fatiga que le impide
expedirse como él quisiera. La pleura sufre una
conmoción. El simpático, será tocado en una de
las operaciones. También el estómago.
(48)
(49)
Un año más tarde, cual testimonio de lo
ocurrido, Pedro Espinel Torres escribió el vals
Fin de bohemio cuya letra dice:
“…Aire, es lo que quiero / aire para vivir esta tos
maldita que mi pecho agita rasgándolo sin cesar /
con su acceso tan terrible que me hace
sangrar/…”,
lo que también nos da una idea de la afección
pulmonar de Pinglo.
La muerte de Pinglo pasó, prácticamente,
desapercibida para el Perú ocial. El mundo
de Pinglo guardó luto por algunos días,
las guitarras y las voces callaron. Después,
gradualmente ocurrieron las remembranzas
y los homenajes de parte de los intérpretes,
autores y cultores de la música criolla. La
48 RPP Noticias; 2016.
49 En la era preantibiótica, hasta mediados del siglo XX se empleó
la colapsoterapia para el tratamiento de la tuberculosis. La idea
era restringir el oxígeno al pulmón afectado, cerrar las
cavitaciones y detener la hemoptisis. Los métodos más
empleados fueron el neumotórax, neumoperitoneo,
toracoplastia, plombaje extrapleural y sección del nervio frénico
(frenicectomía). El nervio frénico tiene bras motoras
(diafragma), sensitivas (serosas pleural, pericárdica y
peritoneal) y simpáticas.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
40
fama de Pinglo se acrecentó en la medida que
sus canciones fueron dadas a conocer por los
intérpretes en las jaranas y en las funciones
que se llevaban a cabo en los teatros, en las
radioemisoras y en los centros musicales que
se fueron creando en diversos puntos de la
ciudad.
(50)
PInGlO y la músIca crIOlla
Pinglo fue un compositor original y las letras
de sus canciones reejan su apreciación de la
vida en la Lima de principios del siglo XX.
Fusionó armonías del fox trot, one step y el
tango con el vals. Las letras de sus canciones
fueron registradas en los cancioneros, al igual
que la de otros autores. Los músicos tocaban
“de oído” pues no leían partituras ni escribían
pentagramas. En esta época era común que
los intérpretes cambiaran las letras; y, que
algunos autores emplearan o se apropiaran de
versos de poetas locales o de otras tierras, los
modicaran y los hicieran suyos.
(51)
(52)
Pinglo fue un retratista de su época. Su
sensibilidad artística le permitió plasmar en
una composición la realidad que percibía.
Así le escribió a la modernidad, al fútbol y
los futbolistas, al amor, al desencanto, a la
frustración, a la añoranza, al reclamo social,
etc.
Se ha destacado el contenido social de algunas
de las composiciones de Pinglo pero él le cantó
50 Estos centros musicales o centros sociales musicales eran casas
o establecimientos donde se cultivaba la música criolla. Años
más tarde, estos centros devendrían en lo que se conoce como
peñas, con las mismas funciones.
51 Erróneamente el sello Odeón, de Chile, colocó a Pinglo como
autor del vals Hermelinda, a nes de la década de 1940,
atribuido al compositor barrioaltino Alberto Condemarín
(1898-1975). Posteriormente, se descubrió que Condemarín
había utilizado los versos alejandrinos de cuatro estrofas
del poema Acuérdate de mí del poeta español Enrique Príncipe y
Satorres (1846-1906), publicado en 1903.
52 Mejía, Darío. El origen español del vals peruano Hermelinda.
Portadas de cancioneros con homenajes a Pinglo.
a todo. También se ha querido ver en él un
desdichado, un sufrido personaje, y hay más
de un estudio psicoanalítico sobre la letra
de sus canciones y elucubraciones sobe su
personalidad. Esto no es válido porque Pinglo
no compuso sobre sus vivencias sino sobre
cualquier hecho o personaje que concitó su
atención.
Pinglo fue un zurdo de esmirriada gura y
cojera, circunspecto pero gran colaborador
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
41
para participar en cuanto evento jaranero o
festivo se le invitara. Se ha dicho y se dice que
su música, y la música criolla en general, es
triste. No es así, pues Pinglo tuvo un variado
repertorio de temas. Las canciones tristes
también las encontramos en los blues, el tango,
el bolero, la ranchera, etc., pero no podemos
generalizar. Más aún, en las jaranas se baila los
valses “tristes” y los alegres.
Contrariamente a los que sostienen algunas
versiones sobre lo que motivó a Pinglo escribir
El Plebeyo, su hija Carmen acotó: Sé de esas
hipótesis. Pero mi mamá me contó que fue escrita
para su hermano, mi tío Ricardo, que pasó por esa
experiencia. Ellos eran muy unidos y compartió
con mi papá el dolor de haber sido rechazado por su
condición más modesta en comparación con la de la
mujer de quien estaba enamorado”.
(53)
El valor de los cancioneros radicó en que sirvió
de asentamiento de las letras pero no incluía
las partituras porque, simplemente, no las
tenían. En marzo de 1935 se publicó la partitura
de Luis Enrique, El plebeyo elaborada por el
músico Pedro A. Montalva, quien se colocó
como coautor.
(54)
No se sabe cuánto contribuyó
Montalva en las armonías originales de Luis
Enrique, El Plebeyo, tanto así que los entendidos
concuerdan en que la versión que se toca y
canta ahora diere de la versión original.
(55)
Quiéranlo o no, Pinglo fue un excelente
compositor aunque para algunos fue un
“huachafo, afanoso por demostrar ser ilustrado,
que se le vio componer con un diccionario bajo
el brazo.”
(56)
53 Velasco Asenjo, Lita. Op. cit.
54 Pedro A. Montalva fue músico transcriptor de Ediciones
Musicales La Rosa Hnos. que al colocarse como coautor
generaría controversia más de una vez en cuanto a las regalías.
55 Sarmiento Herencia, Rodrigo; 2018; 2(1):13-29.
56 Jáuregui, Eloy. 2011:20.
Las composiciones de Pinglo fueron poesías
musicalizadas. Pinglo ostentó el dominio del
verso medido para generar el ritmo y la cadencia
deseada en cada canción.
(57)
Pinglo dejó unas
130 canciones de su autoría. Recientemente,
el estudio meticuloso de su obra ha
permitido identicar como apócrifas algunas
composiciones atribuidas a él.
(58)
Muchas veces no se ha entendido la obra de
Pinglo, solo se circunscriben a la letra de
Luis Enrique el plebeyo. Su obra no solo fue
testimonial sino también contestaría, reejó la
gran desigualdad social que vio y sintió.
(59)
Toda selección tiene cierto grado de
arbitrariedad pero las canciones más
celebradas de Pinglo son: Bouquet, El espejo de
mi vida, El huerto de mi amada, De vuelta al barrio
y Luis Enrique el plebeyo.
(60)
Gradualmente, gracias a los parroquianos del
criollismo y gracias a la radio, el vals criollo
se fue consolidando en la conciencia popular.
Tanto así, que lo gobiernos se acercaron a la
música criolla en el afán de ganarse el voto o la
aceptación popular. Un caso especial, ocurrió
en 1939, durante el gobierno dictatorial de
Óscar R. Benavides; así, se tiene la versión
de que a la dirección de Radio Goicochea
llegó un comunicado para todas las emisoras
de Lima que prohibía la transmisión de diez
canciones criollas, bajo amenaza de multa a la
radio y suspensión indenida a los cantantes.
Dichas canciones fueron de Felipe Pinglo
(Luis Enrique el plebeyo, Oración del labriego,
Mendicidad, El canillita, El huerto de mi amada,
Sueños de opio y Pobre obrerita), de Luis Molina
(El tísico) y de Pedro Espinel (El Expósito y Fin
57 Sarmiento Herencia, R. Felipe Pinglo…2018:50.
58 Sarmiento Herencia, R. Felipe Pinglo…2018:103-130.
59 Toledo Brúckmann, Ernesto; 2007: 155-159.
60 Por Internet, en Youtube, pueden hallarse las versiones de las
canciones de Pinglo por los intérpretes más representativos.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
42
de bohemio).
(61)
(62)
Esta prohibición no era de
extrañar ya que, por ejemplo, El Cancionero de
Lima era abiertamente pro aprista en la década
de 1930 y La Lira Limeña, aparecida en 1929, era
sanchecerrista y anti-APRA.
(63)
Ante la emergencia de la música criolla como
una, cada vez más, fuerte y generalizada
expresión popular, los políticos de turno
tornaron su atención para congraciarse con
los sectores populares. Así, el 18 de octubre
de1944, ante la solicitud del Centro Social
Musical “Carlos A. Saco” y otras instituciones
similares, el entonces presidente de la
República, Manuel Prado Ugarteche, emitió la
Resolución Suprema por la cual se declaraba
el día 31 de octubre como Día de la Canción
Criolla.
(64)
61 Mejía, Darío. http://www.criollosperuanos.com/
Compositores/Dario-Mejia.htm
62 La prohibición no fue ocial; y, se aduce que la razón fue
que circulaba el rumor de que el autor de dichas canciones era el
perseguido líder aprista Víctor Raúl haya de la Torre, cuyo
partido había sido declarado fuera de ley por el gobierno de
Benavides.
63 Borras, Gerard; 2012: 205-278.
64 Inicialmente iba a ser el día 18 de octubre pero como en esa
fecha ocurre la primera salida y la procesión del Señor de los
Milagros se dirió para el día 31 del mismo mes.
La llamada música criolla, con sus diversos
géneros, fue entronizándose gradualmente en
el gusto y la conciencia popular y aparecerían
otros compositores e intérpretes que han hecho
que dicha música se convierta en la música
nacional.
cOnclusIón
Felipe Pinglo fue un notable compositor,
especialmente de valses criollos. Fue un
retratista, un cronista que del divertimento pasó
a plasmar en las letras de sus composiciones
la gran desigualdad social del Perú que le
tocó vivir. Con sus composiciones contribuyó
a hermanar a una parte importante de la
población peruana, a consolidar la identidad
nacional y a forticar el mestizaje poblacional
y cultural.
referencIas BIBlIOGráfIcas
1. Acosta Ojeda, Manuel. Aportes para un mapa
cultural de la música popular del Perú. USMP.
Lima: Gráca Yovera S.A.C., 2015.
2. Borras, Gerard. Lima, el vals y la canción
criolla (1900-1936). Lima: Instituto Francés de
Estudios Andinos, 2012.
3. Cáceres Álvarez, Luis. La catedral del criollismo.
UPC. Lima: Gráca Biblos S.A., 2017.
4. Chocano Paredes, Rodrigo. ¿Habrá jarana en
el cielo? Tradición y cambio en la marinera limeña.
Lima: Ministerio de Cultura, 2012: 40.
5. Collantes, Aurelio. Pinglo inmortal. Lima: Imp. La
Cotera. 1977.
6. García Alva, José Félix. Colección Nemovalse.
Días previos a la muerte física de Felipe Pinglo “El
Maestro”. URL disponible en: https://nemovalse.
wordpress.com/2018/05/05/felipe-pinglo-en-su-
lecho-de-enfermo-antes-de-su-fallecimiento/
7. Geneall. Índice de Apellidos/ P. URL disponible
en: https://geneall.net/es/families/p/
8. Jáuregui, Eloy. El Pirata, Historias de la Música
Criolla. Lima: Editorial Mesa Redonda. 2011.
La serenata. En Apuntes Limeños, José Luis Caamaño, 1935.
Acta Herediana vol. 62, N° 1, enero 2019 - junio 2019
43
9. Leyva Arroyo, Carlos A. De vuelta al barrio. Lima:
Biblioteca Nacional del Perú. 1999: 29-33.
10. Leturia Chumpitazi, José Antonio. Canciones de
Felipe Pinglo Alva. http://joseleturia2005.
blogspot.com/2009/10/canciones-de-felipe-
pinglo-alva.html
11. Leturia Chumpitazi, José. Origen, ritmos y
controversias de la música criolla del Perú. 2ª. Ed.
Lima: Lagargraf S.A.C.; 2018: 111-124.
12. Lloréns Amico JA y Chocano Paredes R. Celajes,
orestas y secretos. Lima: Instituto Nacional de
Cultura. 2009.
13. Mejía, Darío. http://www.criollosperuanos.com/
Compositores/Dario-Mejia.htm
14. Mejía, Darío. Mi homenaje al maestro Felipe
Pinglo Alva, en el 75 aniversario de su sensible
fallecimiento. Viernes, 13 de mayo del 2011.
Reproducido por Armando Alvarado Balarezo.
URL disponible en: http://naloalvaradochiquian.
blogspot.com/2011/05/mi-homenaje-al-maestro-
felipe-pinglo.html
15. Mejía, Darío. José Carlos Mariátegui y su relación
con Felipe Pinglo Alva. 16 de abril del 2015. URL
disponible en: http://www.consentidosiempre.
pe/personajes/jose-carlos-mariategui-y-su-
relacion-con-felipe-pinglo-alva/
16. Mejía, Darío. La vuelta al barrio, 1 de mayo de 2015.
URL disponible en: http://nalochiquian.blogspot.
com/2015/05/la-vuelta-al-barrio-por-dario-
mejia.html
17. Mejía, Darío. Noticias de Lima. URL disponible en:
http://www.todaslassangres.com/
NotassobreLima.htm
18. Mejía, Darío. El origen español del vals peruano
Hermelinda. URL disponible en: https://eruizf.
com/musica/varios/hist_hermelinda.html
19. Mejía, Darío. http://www.criollosperuanos.com/
Compositores/Dario-Mejia.htm
20. Pamo Reyna, Oscar G. La tuberculosis y el vals
criollo en la ciudad de Lima de las primeras
décadas del siglo XX. Rev Soc Peru Med Interna.
2014; 27 (3): 148-154.
21. Rohner FW. La guardia vieja: el vals criollo y la
formación de la ciudadanía en las clases populares:
estrategias de representación y de negociación en la
consolidación del vals popular limeño (1885-1930).
Lima: Ponticia Universidad Católica del
Perú. 2018.
22. RPP Noticias. Felipe Pinglo Alva: La entrevista que
concedió semanas antes de morir. 21 de agosto del
2016. URL disponible en: https://rpp.pe/cultura/
mas-cultura/felipe-pinglo-alva-la-entrevista-que-
concedio-semanas-antes-de-morir-noticia-988912
23. Sarmiento, Rodrigo. Felipe Pinglo y la canción criolla.
Estudio estilístico de la obra musical del Bardo Inmortal.
Lima: Fondo Editorial de la UNMSM, 2018.
24. Sarmiento Herencia, Rodrigo. Los tres plebeyos.
Tras la primera melodía del famoso vals de Felipe
Pinglo. Antec, Revista Peruana de Investigación
Musical. 2018; 2(1):13-29.
25. Toledo Brúckmann, Ernesto. Felipe de los pobres.
Vida y obra en tiempos de luchas sociales. Lima:
Editorial San Marcos; 2007.
26. Velasco Asenjo, Lita. Felipe Pinglo Alva, Un
poeta de la vida. Entrevista a doña Carmen Pinglo
Rivera, 20 de julio del 2016 (Reproducido de:
Anubis número 2 del 2008). URL disponible en:
https://revistaanubis.wordpress.
com/2016/07/20/felipe-pinglo-alva/#more-852
27. Zanutelli, Manuel. Felipe Pinglo… a un siglo de
distancia. Lima: Diario El Sol. 1999.
28. Zanutelli, Manuel. Canción criolla: memoria de lo
nuestro. Lima: Diario El Sol, 1999.